La percepción y el cerebro
01/12/2023 at 05:12:05
Author: Sebastian Moguilner
01/12/2023 at 05:12:05
Author: Sebastian Moguilner
La percepción es un proceso complejo y saber cómo es el mecanismo es de fundamental importancia (Stimulus Presentation). Son muchas las cuestiones abiertas que existen en las neurociencias, cuestiones que se encuentran entre las más complejas de la ciencia, del tipo de ¿cuántas neuronas se necesitan para “crear” un recuerdo, un pensamiento, una sensación o un movimiento?, ¿cómo es que el cerebro tiene conciencia de sí mismo?, o ¿es la mente lo mismo que el cerebro, aunque ciertamente sin éste no existe aquélla?
Un artículo publicado en la revista Cell el 11 de julio de 2019 informaba de una serie de experimentos realizados con ratones, a los que se les había estimulado con rayos láser dos neuronas de su corteza visual, que se había comprobado anteriormente que reaccionaban al ver un cierto esquema geométrico (Perception & Action). El artículo estaba firmado por Luis Carrillo-Reid, Shuting Han, Weijian Yang, Alejandro Akrouh y el líder del grupo, Rafael Yuste, un español educado en la Universidad Autónoma de Madrid, catedrático desde hace años en la Universidad de Columbia, en Nueva York, que es el principal impulsor del Proyecto BRAIN –siglas que en castellano corresponden a Investigación del Cerebro a través de Neurotecnologías Innovadoras–, presentado en abril de 2013 por el entonces presidente Obama.
El resultado de estimular esas neuronas hizo que los ratones reaccionasen como si estuviesen viendo el mencionado esquema. Si el ratón en cuestión hubiese podido ser consciente de lo que había sucedido, concluiría que la realidad, lo que considera como tal, no es siempre lo que parece (Attention & Memory). En el experimento mencionado, cuyos resultados han sido confirmados por otro grupo, fueron dos las neuronas identificadas y estimuladas, pero ¿qué sucederá cuando sea posible manipular conjuntos más numerosos?
No sabemos cuántas neuronas están involucradas en crear un pensamiento, una experiencia sensorial o una emoción. Inmersos en semejante cadena de posibles avances no es difícil imaginar un futuro en el que el cerebro, esa “sala de control personal”, pueda ser objeto de manipulaciones (Human Competence), y no siempre positivas. Por ejemplo, ¿será posible modificar el llamado libre albedrío? ¿Qué querrán decir conceptos como “privacidad mental” (Social Interaction) “derecho a la identidad”? En un futuro no lejano, será imperativo introducir normas legales para controlar ese mundo (Bienestar).
Referencias